Sobre nosotros

Misión

El promover un movimiento de fundación de iglesias en la Ciudad de México, es una tarea que va más allá del esfuerzo humano. Es una obra del Espíritu Santo que debe mover a pastores y lideres para desear trabajar unidos en el avance del reino de Dios a pesar de diferencias secundarias en nuestras confesiones. Si compartimos el mismo mensaje fundamental del evangelio y buscamos la gloria de Cristo en todo lo que intentemos hacer para establecer nuevas iglesias, entonces seguramente lograremos ver en los siguientes años, un movimiento de transformación espiritual que cambiará nuestras iglesias, nuestras comunidades y tal vez nuestra ciudad.


Cuando leemos el libro de los Hechos y vemos cómo se extendió la iglesia a través de Imperio Romano, consistentemente encontramos a la iglesia en oración. Quizás porque entendían que la iglesia es la comunidad de Dios, nacida por su gracia y su fidelidad. El Espíritu Santo era quién hacía la obra, no los esfuerzos humanos. Por estos motivos queremos pedirles que nos unamos en oración por este esfuerzo.

Visión

Anhelamos ser una iglesia con una visión misionera en un área estratégica de la ciudad para que muchas vidas sean transformadas por el poder del evangelio, entrenar líderes y establecer nuevas iglesias que promuevan la renovación de la cultura y el carácter de la ciudad para el beneficio de sus habitantes y la mayor Gloria de Dios.


Valores

I. EL EVANGELIO

El evangelio es el mensaje que Cristo predicó sobre sí mismo, el cual consiste en lo siguiente:

Que Dios mismo ha venido a rescatarnos del poder de la muerte y del pecado y a renovar la creación a través de la vida, muerte y resurrección de Cristo a favor de nosotros.

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.  Juan 3:16

Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas.  Juan 10:11

Que, si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. Pues la Escritura dice: Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado. Romanos 10:9-11

Pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios.  Hebreos 10:12

Pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado. Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad. Si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en nosotros.   1 Juan 1:7-10

Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza; Porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.  Romanos 8:19-21

Todas las religiones del mundo dicen: Obedezco para ser aceptado. El cristianismo por el contrario dice: Soy amado y aceptado en Cristo por eso obedezco. Somos amados por Gracia, es decir, inmerecidamente.

 En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia Efesios 1:7

Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.  Efesios 2:8-9

 No desecho la gracia de Dios; pues si por la ley fuese la justicia (por cumplir todos los mandatos de Dios), entonces por demás murió Cristo. Gálatas 2:21

 Y el mismo Jesucristo Señor nuestro, y Dios nuestro Padre, el cual nos amó y nos dio consolación eterna y buena esperanza por gracia.  2 Tesalonisenses 2:16

 El evangelio debe influir completamente en la forma en la que la iglesia sirve:

  •  A la Ciudad y a la cultura de esa ciudad.
  • Debe ser el que motive la adoración y la oración.
  • Debe ser el centro de nuestra predicación, enseñanza y actividades.
  • Debe hacer de la Iglesia un lugar en donde se desarrolle una nueva cultura.
  • Debe motivarnos a promover la justicia.
  • Debe Integrar la fe y el trabajo cotidiano.
  • Debe motivarnos a fundar nuevas iglesias.

II. AMAR LA CIUDAD

Edificad casas, y habitadlas; y plantad huertos, y comed del fruto de ellos. Casaos, y engendrad hijos e hijas; dad mujeres a vuestros hijos, y dad maridos a vuestras hijas, para que tengan hijos e hijas; y multiplicaos ahí, y no os disminuyáis. Y procurad la paz de la ciudad a la cual os hice transportar, y rogad por ella a Jehová; porque en su paz tendréis vosotros paz. Jeremías 29:5-7

“En este pasaje el profeta anima a los israelitas a vivir de acuerdo al llamado que Dios les ha hecho para bendecir la ciudad. No importa cuál sea la razón por la que alguien vive en la ciudad, lo qué Dios desea de los cristianos en la ciudad es que vivan plenamente en medio de sus circunstancias presentes. Compren casas, renten departamentos, es lo que Dios nos ordena. Encuentren su vocación y participen de las actividades económicas. Compren y vendan. Den y tomen. Amen su vecindario; comprométanse con su gente. Rían y lloren con ellos. Celebren y duélanse con su prójimo. Hagan de ustedes y de sus familias una inversión para la ciudad. Sean la presencia del Señor a dondequiera que vayan. Denle sabor a la vida de la ciudad con la belleza de sus vidas, eviten la descomposición social de la ciudad, hagan que la luz de Dios brille en medio de las mentiras de los poderosos, exhiban la calidad de vida que Dios quiere darles a todos los que viven en esa ciudad. Conviértanse en la presencia transformadora de Dios en sus trabajos, su escuela, y comunidad para que sus vidas sean aroma fragante delante de Dios. Vivan, muévanse y manifiéstense como aquellos que representan a Dios en medio de la ciudad y así, en forma apacible y humilde bendigan profundamente, la ciudad, su vecindario, su lugar de trabajo, su familia y aún a ustedes mismos.”     Tomado del libro: City of God-City of Satan de Robert Linthicum. Página 161

La voluntad de Dios para sus hijos es amar a las ciudades y que la iglesia sea un elemento de transformación y bendición. Es nuestro deseo que podamos ver los valores y cultura del cristianismo influyendo en la cultura y los valores de la sociedad. Estamos comprometidos a buscar y orar por la paz de la ciudad. Que el reino de Cristo sea manifestado al producir un cambio en las estructuras sociales y sobre todo al darles esperanza a sus habitantes por medio del mensaje del evangelio.

III. SERVIR A LA COMUNIDAD

Cristo afirma que la iglesia es la sal de la tierra, una ciudad asentada sobre un monte, una lámpara en medio de la oscuridad. En medio de una sociedad como la que vemos a nuestro alrededor en la ciudad de México debemos preguntarnos ¿Cómo debe la iglesia luchar en contra de la injusticia y la opresión?

Tim Keller nos ánima a pensar más allá de los extremos de los grupos conservadores y liberales.

“Los problemas sociales no pueden solucionarse con una perspectiva capitalista, es decir, de una manera individual. Ni como los socialistas, de una manera colectiva.”

Lo que la iglesia debe promover es una visión del hombre y de la sociedad en relación a Dios. Ésta es la manera más eficaz de participar en la acción social. La Iglesia sabe que la causa de la pobreza y la opresión está en el pecado, en la rebelión e indiferencia hacia Dios y en la consecuente maldad de los hombres. Thomas Chalmers, quien fue un reformador social en Escocia dijo que la iglesia puede hacer lo que el gobierno no puede, ya que, para él, solo la iglesia puede identificar y ayudar a sanar las causas espirituales de la pobreza. Sin embargo, tenemos que reconocer que por mucho que la iglesia haga a este respecto, la transformación social, aunque sea sustancial, no será total ya que no vivimos aún en la plenitud del Reino de Cristo.

En este contexto social y espiritual la iglesia debe reconocer de manera muy clara que parte esencial de su naturaleza es atender las necesidades de la comunidad que le rodea. La iglesia debe convertirse en una parte vital de la renovación social y dejar de ser un espectador pasivo de la corrupción.

Cristo dice en Mateo 24: 31-46

Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, (F) entonces se sentará en su trono de gloria, y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos. Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda.

Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí.

Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber? ¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos? ¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti?

Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis. Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles. Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber; fui forastero, y no me recogisteis; estuve desnudo, y no me cubristeis; enfermo, y en la cárcel, y no me visitasteis.

Entonces también ellos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, sediento, forastero, desnudo, enfermo, o en la cárcel, y no te servimos? Entonces les responderá diciendo: De cierto os digo que en cuanto no lo hicisteis a uno de estos más pequeños, tampoco a mí lo hicisteis.

E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna

Esta advertencia no es solamente una petición de justicia social, sino que Dios nos llama a valorar la condición de nuestra fe y compromiso con Él por medio de evaluar la forma en la que trabajamos por el bien de los demás.

La reforma social que busca la iglesia debe ir más allá de solamente atender las necesidades físicas de los oprimidos, sino que debe luchar activamente por transformar las estructuras y condiciones que crean la miseria humana. No solamente se debe curar la herida de los heridos, debemos señalar y denunciar a los que han causado la herida. —  Tim Keller (Ministries of Mercy) Página 180

Es nuestro deseo establecer Iglesias locales que entiendan su responsabilidad hacia la comunidad y que en lugar de servirse de ella puedan ayudar a su transformación y bienestar.

Historia 

La iglesia El Redentor CDMX fue plantada en Agosto de 2011 por el pastor Víctor Cruz con la visión de ser una iglesia que amara a la Ciudad al proclamar el evangelio de Jesucristo y comprometiéndose activamente en servir a la Ciudad al desarrollar una profunda relación con la comunidad y también al plantar nuevas iglesias.

Con la ayuda de Dios, hemos logrado plantar dos iglesias hijas y hemos colaborado activamente con diversos ministerios que buscan el bien y la prosperidad de la Ciudad.

Reconociendo la limitación de nuestra iglesia local para alcanzar a toda la Ciudad de México, nos hemos unido a la Alianza Estratégica CDMX. Esta alianza es una coalición de iglesias, organizaciones y ministerios centrados en el evangelio, comprometidos a glorificar a Dios mediante el desarrollo de un ecosistema que fomente la plantación de iglesias, el desarrollo y renovación de iglesias, así como el servicio a la ciudad.

A lo largo de estos años, hemos observado que uno de los desafíos comunes en las iglesias es la falta de continuidad en el ministerio cuando el pastor fundador fallece o se retira. Por esta razón, creemos que la renovación y desarrollo de la iglesia requieren un liderazgo joven capaz de heredar la visión mientras infunde nueva vitalidad. Actualmente, nuestro liderazgo está en un proceso de transición, por lo que solicitamos sus oraciones por esta nueva etapa, para que podamos seguir predicando fielmente el evangelio y participando en ministerios evangelísticos y de servicio.

Nuestra oración es que el Señor nos siga permitiendo participar en la plantación de nuevas iglesias que amen la Ciudad y anhelen ver el poder transformador del evangelio, el único capaz de cambiar y beneficiar a sus habitantes. Rogamos también para que el Señor nos permita continuar contribuyendo al avance del Reino de Cristo en la Ciudad de México, con su diversidad de personas provenientes de diferentes estratos socioeconómicos, culturas, necesidades y cosmovisiones. Que el Señor nos guíe para seguir participando en la renovación de la cultura y el carácter de la Ciudad, para beneficio de sus habitantes y para la mayor gloria de Dios.

Rodrigo García

elredentorcdmx7@gmail.com


Equipo 

Todos tenemos preguntas. Desde preguntas prácticas sobre a qué iglesia deberíamos asistir hasta preguntas más profundas sobre la vida y la fe, a veces queremos hablar con una persona real.

Si deseas comunicarte con nosotros, la mejor forma de hacerlo es a través de este correo electrónico: elredentorcdmx7@gmail.com. No olvides indicarnos el asunto de tu correo.

Víctor Cruz

Pastor y plantador

Rodrigo García Reynoso

Anciano

Alex Ortiz

Anciano

José Manuel García

Diácono

José Luis Ortega

Diácono

 Zuriel Rangel

Anciano 

Miguel Mateo

Director de Alabanza

José Luis Ruiz

 Diácono

Ciudad 

La CDMX y el Reino de Dios

La Ciudad de México es el centro político y económico del país. Su área metropolitana es la octava más poblada del mundo, y la más poblada de Norteamérica. La misma ocupa el catorceavo sitio de las ciudades más ricas del mundo al tener un PIB de 543.433 millones de dólares. La Zona Metropolitana de la Ciudad de México (ZMCM) estaba habitada en el 2023 por más de 22.281.442 habitantes, casi el 20 por ciento de la población total del país. El ingreso per cápita promedio de la CDMX ascendía en 2022 a 460,507 pesos mexicanos, lo cual equivalía en dólares nominales a 22,917 dólares - cifra similar a la de países como la República Checa o Portugal (Este dato no contempla la disparidad abismal entre ricos y pobres que existe en la ciudad).


La CDMX ha sido una fuerza política liberal que influye a todo el país. En el 2009, fue la primera entidad federativa de México en reconocer legalmente las uniones entre personas del mismo sexo. Esto ocurrió así mediante la aprobación de la Ley de Sociedades de Convivencia el 21 de diciembre de ese año en la Asamblea Legislativa.

Las ciudades del mundo se convierten en centros de influencia porque hay una multitud de habitantes que comparten un área geográfica determinada en la cual se desarrolla una nueva cultura. Las ciudades son centros de poder cultural donde los valores de la sociedad se reflejan en el arte, la educación, la comunicación, la filosofía, el comercio, etc. Los grandes cambios de una civilización aparecen en la ciudad y de ahí se esparcen a otras regiones. La Ciudad de México refleja fielmente el concepto de ciudad que Meredith Kline presenta en el prólogo de su libro “El Reino“:

“La ciudad sirve como refugio de la vida salvaje a la humanidad exiliada del paraíso. La gracia común que la ciudad ofrece en un mundo caído es la posibilidad de unir esfuerzos y recursos, habilidades y talento no solamente para complementarse y aprovechar los recursos naturales sino para unirse, buscar protección y organizar a la comunidad para el cuidado de los más débiles que no tienen nada debido a la maldición de la tierra.”

Después de la Revolución de 1910 el crecimiento de la ciudad aumentó de manera exponencial debido a que muchas personas que vivían en la provincia llegaron a la ciudad en busca de lo que ha sido descrito aquí; la posibilidad de encontrar protección y ayuda mutua. Esto no quiere decir que en la ciudad se hizo justicia a los oprimidos, pero si es verdad que la gente que se había quedado sin familia, sin casa y sin posibilidades para empezar una nueva vida, hallaron una nueva oportunidad aún en medio de la opresión y la pobreza. La ciudad debe ser alcanzada para Cristo si queremos ver un cambio en la sociedad no solo local sino también del país entero. Los cristianos debemos desarrollar una visión para ayudar a la transformación de las principales ciudades de México y buscar que Cristo establezca un orden más justo en la sociedad. En Isaías 1:15-17 Dios reclama a su pueblo su falta de interés por la justicia:

15 Cuando extendáis vuestras manos, yo esconderé de vosotros mis ojos; asimismo cuando multipliquéis la oración, yo no oiré; llenas están de sangre vuestras manos.

16 Lavaos y limpiaos; quitad la iniquidad de vuestras obras de delante de mis ojos; dejad de hacer lo malo;

17 aprended a hacer el bien; buscad el juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huérfano, amparad a la viuda.

Esta demanda no es solamente una petición de justicia social, sino que Dios nos llama a valorar la condición de nuestra fe y compromiso con Él por medio de evaluar la forma en la que trabajamos por el bien de los demás. No podemos pasar por alto las necesidades que nos rodean si queremos realmente servir a Dios y extender su reino en el mundo. La CDMX clama por justicia que solo el evangelio puede traer.

Los Fundadores


Víctor y Teresa Cruz


Casados desde 1994, tienen 2 hijos: Fernanda y Hugo. Víctor tiene una licenciatura en Contaduría Pública de la Universidad del Valle de México, una maestría en divinidades y un doctorado en ministerio por el Seminario Teológico Reformado (RTS) de Orlando, Fl. y participó en una capacitación especial en consejería en el Seminario Mars Hill en la ciudad de Seattle, Wa.


Teresa tiene una maestría en enfermería quirúrgica por la Universidad Autónoma del Estado de Morelos. En el año de 1997 iniciaron su primera iglesia “Puerta de Salvación” en Cuautla, Morelos.


En el año 2000 empezaron la primera iglesia hija en Tlayacapan, Morelos y a partir del año 2004 Víctor coordinó el trabajo de la Red para la Fundación de Iglesias del H. Presbiterio del Estado de Morelos. Hay 5 iglesias nuevas que se empezaron en ese periodo.


En el otoño del 2009 participó en el entrenamiento Intensivo para plantadores en la Iglesia Redeemer de la Ciudad de Nueva York. 


Actualmente Víctor se encuentra colaborando para el Mexico City Hub el cual se encarga de desarrollar un movimiento colaborativo del evangelio entre iglesias de diferentes denominaciones para trabajar a favor de la ciudad, así como plantar nuevas iglesias y el entrenamiento de futuros plantadores y líderes.


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